La situación de las oficinas post Covid-19, más que probablemente, desembocará en grandes cambios a la hora de trabajar. De hecho, términos como coworking y teletrabajo son mucho más familiares para todos en estos tiempos. No cabe duda que muchos nuevos y antiguos emprendedores, autónomos o pymes, elegirán el coworking para sus futuras inversiones y zonas de trabajo.
El coworking es básicamente una oficina compartida. En ella se llegan a juntar, trabajadores de cualquier tipo de sector, en la que lo único que tienen en común es la tarifa mensual que abonan por ocupar un puesto en estos «nuevos» centros de negocios. Hay algo aún más importante, no se tienen que preocupar de nada más. Los miembros de los centros son los que corren con todas las gestiones administrativas intrínsecas de los negocios, por lo que estos «coworkers» pueden centrarse en los más importante, trabajar.
Diferentes tipos de oficina
Suele haber tres tipos de oficinas. Flexibles, puestos fijos u oficinas privadas. En cuanto a Alzola Coworking se refiere, contamos con todas ellas, para tener la oportunidad de ofrecer todas las facilidades posibles a nuestros clientes. Los puestos flexibles, te aportan total «flexibilidad» en cuanto a horarios, como su propio nombre indica, aunque no tengas un lugar específico en el que ubicarte. Además suelen dar la posibilidad incluso de ir a diferentes emplazamientos de una misma cadena de coworkings. Los fijos, te dan la posibilidad de tener un espacio personal, aunque sea en un lugar compartido.
Y en lo que se refiere a las oficinas o despachos privados, cuentas con el «upgrade» de tener un lugar únicamente para tu empresa. Añadiendo todas las ventajas administrativas o de servicios que ofrecen este tipo de negocios del futuro.
Ventajas del coworking frente a la oficina tradicional
Son múltiples por tanto las ventajas del coworking, empezando por una de las más importantes. Para tu negocio, la inversión inicial para comenzar a disponer de un lugar de trabajo será cero. Ahorraras en tiempo y dinero para tu negocio y podrás entrar a trabajar con todo preparado desde el primer minuto. Solo tendrás que pagar la tarifa mensual. Tampoco tendrás costes imprevistos, por lo que habrá un control de los gastos mucho mayor. Por otra parte, tu negocio estará en una localización excelente, donde normalmente adquirir una oficina particular suele tener un coste muy elevado.
Para ir terminando, este tipo de centros suelen destacar por su gran flexibilidad en cuanto a contratos o superficie. En este sentido, normalmente podrás variar o elegir la duración de tu estancia y también variar del espacio contratado según las necesidades. De esta manera tus costes se adecúan a tus necesidades en cada momento.
Solo queda destacar varios de los valores más preciados que poseen los «coworkings», como son las sinergias entre trabajadores o los servicios añadidos que otorgan como son el alquiler de salas de reuniones o aulas de formación, espacios para eventos, oficinas virtuales o cocina entre muchos otros.
La normalización acelerada del teletrabajo impulsa el coworking
Antes de irnos, queremos señalar el gran crecimiento de estos centros y su «normalización» en nuestra sociedad los últimos años y sobre todo en nuestro país, frenado eso sí por la pandemia mundial que nos asola. En el año 2020, España era ya el cuarto país del mundo con más centros de coworking, con 939 repartidos por toda la península. Por lo tanto creemos que las oficinas post Covid-19 seguirán con su crecimiento, más si cabe habiendo dado saltos de gigante en la normalización mundial del teletrabajo.